Crónica macarra: Paraguay 0 - Perú 0

Tras cuernos, palos. Palos de la afición, palos de la prensa, palos que han salvado la tarde en Ciudad del Este y en la neblinosa capital. Este parece ser el derrotero del nuevo seleccionador Reynoso, que no desea ver a los periodistas sin citación previa. Dicho de otra manera: hoy no atiendo provincias. No me llames, ya te llamaré.

A ciencia cierta, el tener un mar movido y la vuelta a la normalidad climática en la capital habían ocasionado en el hincha una sensación de que era una tarde para manta y partido, o partido con siesta, o siesta sin partido, o disgustos por el partido. Sea como sea, en algunas cosas hemos ido a mejor y en otras a peor. Por ejemplo, en la casa de la selección pudieron conseguir el sueño del escenario propio. Es así que esta temporada pudieron estrenar uno simpático y perfectamente iluminado, de primer mundo. Tal es su éxito que viene siendo utilizado en todos sus programas. Era una mejora fundamental y necesaria pues tenían a los chicos en un lugar que parecía el estacionamiento subterráneo de la CGTP o algún lugar de reggae en Quilca. Quizá eso influía en la selección del personal. No se sabe. Como fuese, el día de partido, al parecer alguien no se había enterado del tema y mando vestir a los presentadores con uniforme de «Los Portales». La verdad no sabía uno si estaban hablando de fútbol o de un nuevo proyecto en Asia. En fin. Felizmente alguien con buen tino, y, estimo, luego de algunos carajos, logró que se vistieran como Dios manda para el post-partido. Cosa que es de agradecer.

Corrían los últimos minutos del primer tiempo y la gente ya se visualizaba teniendo que buscar un cachuelo más para cubrir ese nuevo horado en sus finanzas, originado por el 15 a 1 de Perú gana el partido. ¡Pero, si todo estaba dado para que lo gane! ¡Esto lo escuché en YouTube y en la casa de la selección!, vociferaban mientras veían por la tele como Yape se convirtió en el BCP, o algo así. La verdad que nadie entendió nada. Otro caso similar a aquella publicidad de «¿Lo tumbo?». Al menos, a esa la recuerdan por la frase, pero nadie recuerda si se trata de una empresa de demoliciones, dinamitas, venta de combas, o qué. Cosas de los que van a Quilca.

En Ciudad del Este dejaron ya el jolgorio por las millas acumuladas y empezaron a trabajar «analizando» el partido. Nadie lo esperaba, pero Reynoso se volvió a marcar un Marruecos. Cambió buena parte del equipo, a pesar de saberse con 10 jugadores en campo. Días antes, los del micrófono que no funciona habían afirmado que el no llevar a tal y tal y presentar un cuadro nuevo era una mala decisión, pero son cosas del cabezón. Seguro que lo ha estudiado y ve que esos no rinden. Están bien para jugar contra tal y tal, pero no para gente que juega en otro nivel. Ojalá hablasen más de esto en las transmisiones o comentarios sobre los partidos de liga. Pero eso no vende, claro. Vale. Los únicos que se atreven a tal cosa son los amigos del balcón. Un aplauso por esto. Hasta la próxima semana garotos.