Después de un poco más de 10 años de servicio ininterrumpido, hoy ha dejado de funcionar LocalBitcoins.com. Este sitio web permitía el intercambio de bitcoin de una manera muy fácil entre personas de distintos lugares en el mundo. El éxito de esta plataforma se centraba en el hecho de que actuaba como fideicomiso del monto en bitcoin que se transaba en cada transacción, y por la que cobraba una comisión al vendedor. Al actuar de manera similar a las plataformas digitales de contratación de trabajadores, reducía los factores que hacen una transacción comercial a través de Internet compleja y riesgosa. No es raro que muchos de los actores conocidos en el mundo de bitcoin, los llamados OGs, hayan realizado allí sus primeras transacciones. No se necesitaba saber lo que es una billetera bitcoin y sus pormenores, ni tampoco el realizar procesos complejos para darse de alta. Era un portal de clasificados para negociar bitcoin. Si querías comprar bitcoin colocabas un anuncio con el precio que estabas dispuesto a pagar y el medio de pago. Si querías vender bitcoin, lo propio, el precio al que querías vender y cómo te debían pagar en dinero en efectivo, por ejemplo.
Durante los próximos 12 meses la plataforma solo permitirá el acceso para el retiro de los bitcoins que eventualmente tengan los usuarios que allí negocian. Aún cuando no ha sido un mal negocio para sus fundadores, de origen finés. El tener sus ingresos en bitcoin les ha significado un problema para costear las operaciones y las crecientes demandas de los reguladores para implantar controles y medidas similares a otras empresas del sector financiero. Esto debido principalmente a la gran caída en las cotizaciones que hemos tenido los últimos años. La fortaleza competitiva de LocalBitcoins para atraer gran cantidad de usuarios, llegando a dar de alta a 500 usuarios por día, resulto una limitante a medida que sus costes operativos se incrementaban y sus ingresos, en valor de dinero de curso legal, se reducía.
Solo queda felicitar a Jeremias Kangas por esta aventura y sobretodo por la decisión de no recurrir al denominado capital de riesgo (¿qué forma de capital no tiene riesgo?) y financiar el desarrollo inicial con el dinero que tenía a la mano. Gracias totales.
