En EE.UU. se ha hecho legal el uso de marihuana, lo que ha convertido a esta planta en el nuevo tabaco o alcohol para efectos prácticos. Honestamente, ya lo era, sobretodo en el sector juvenil (sí también esos de 30 y pico). Todo esto ha resultado en un buen negocio para las empresas y el gobierno, que viene recolectado millones de dólares en impuestos solo por este sector, superando sus expectativas.
Es así que la industria sigue incorporando componentes derivados de esta planta en productos alimenticios tan variados como las bebidas o aperitivos. El componente más utilizado es el CBD, que según sus promotores ayuda con el dolor, inflamaciones, depresión, ansiedad, estrés y otras enfermedades modernas y antiguas.
Uno de los productos de consumo masivo que se han introducido al mercado recientemente son bebidas carbonatadas. Una de ellas llamada DRAM, que incluye el componente CBD; se vende con entrega a todo el país y planea estar en todas las tiendas minoristas. También existen productos similares que emplean el componente THC, que es el que causa las alucinaciones y el responsable de que sea legal en 50 estados; y que ha participado del programa de aceleración de Y Combinator, ni más, ni menos.
No es sorpresa que hayan tiendas licenciadas destinadas a la venta de esta planta, y por supuesto, en un futuro no muy lejano quizá encuentres estos nuevos productos en tu café o tienda de productos eco-saludables, 100% orgánicos, etc. Así que a poner atención antes para no tener un “viaje” involuntario.
